Para la masa:
1 taza de harina 150g
6 cucharadas de mantequilla blanda 50g
½ cucharadita de sal
7 cucharadas de agua fría
Para el relleno:
¾ taza de azúcar
½ cucharadita de sal
1 cucharadita de canela molida
½ cucharadita de jengibre
¼ cucharadita de nuez moscada
2 huevos
1 ¾ taza de calabaza hervida triturada
1 taza de leche evaporada
Para la masa: Mezclamos la harina y la sal, después añadimos la mantequilla y mezclamos con los dedos.
Por último se añadimos el agua. Amasamos bien, formamos una bola, y con el rodillo formamos un círculo con el que forramos el molde. Hacemos los bordes con la masa restante, y los hacemos de un grosor algo mayor.
Para el relleno: Mezclamos el azúcar, la sal, la canela, el jengibre y la nuez moscada. Añadimos y mezclamos los huevos batidos, la calabaza y la leche.
Vertimos la mezcla en el interior del molde forrado con la masa. Cocer en el horno a 225º C por 15 minutos y después a 175º por 40 ó 50 minutos.
Sabremos que está listo cuando, al clavar la hoja de un cuchillo liso en el centro del pastel, salga limpio.
Después lo dejamos enfriar.
Servimos en porciones triangulares y se suele acompañar con un montoncito de nata montada sobre cada porción.
Tips: Para el relleno podemos añadir ½ cucharadita de esencia de vainilla.