24 galletas oreo o similares
60 g de queso mascarpone o queso crema
Chocolate de cobertura blanco
Gominolas rojas o verdes
12 palos de chupa-chups o brochetas de madera
Trituramos las galletas en la picadora.
En un bol mezclamos las migas de galletas y vamos incorporando poco a poco el queso hasta conseguir la consistencia adecuada y que no se nos pegue a las manos.
Formamos bolas del tamaño de un chupa-chups más o menos y las colocamos sobre una bandeja con papel vegetal o de aluminio. Las dejamos reposar en la nevera por15 minutos.
Introducimos el chocolate en bol en el microondas para fundirlo. Calentamos un minuto a máxima potencia y removemos. Si todavía no está fundido lo calentamos un minuto más y así hasta que estén completamente derretido.
Hacemos un agujero con la brocheta en la bola hasta la mitad, mojamos la punta de la brocheta en el chocolate y pinchamos la brocheta en la bola.
Hacemos lo mismo con todas y reservamos otros 15 minutos en la nevera. Para que quede más sujeta la brocheta a la bola y no se nos suelte después al bañarla en chocolate caliente.
Ahora introducimos cada bola en su chocolate, escurrimos el sobrante con pequeñas palmaditas en la mano que sujetamos Cake Pops hasta que ya no gotea, lo dejamos reposar pinchado en un corcho o dentro de una taza.
Para decorarlas momias les pegamos los ojos cuando el chocolate todavía está un poco blando. Metemos a la nevera.
Cuando esté solidificado hacemos las vendas con la ayuda de una manga pastelera de boca fina o hacemos con un trozo de papel vegetal.